Cuando tenemos ansiedad, esta puede ser nuestra “amiga”, al protegernos de un peligro real, o nuestra “enemiga” cuando el peligro es imaginario o no existe. Esto quiere decir que la ansiedad es una emoción natural que funciona como sistema de alarma; sin embargo, cuando no logramos entender nuestros miedos irreales y no los afrontamos, los estamos pausando, evitando o huimos de ellos; al hacer esto, el miedo aumenta hasta tener un ataque de pánico. El ataque de pánico se siente muy muy fuerte y puede hacer que vayamos al hospital pensando que tenemos un ataque cardíaco, problemas de respiración o pérdida de control.
Algo que sabemos de los ataques de pánico, es que cuando nuestro cuerpo se altera, es precisamente porque nos está cuidando de un peligro (el cual no existe); por eso, entender los síntomas nos ayudará a responder de una mejor manera ante un ataque de pánico:
Y algunas claves para superar el ataque de pánico son:
Aprender sobre las sensaciones:
cuando sentimos miedo, nuestro cuerpo se prepara para la acción, entonces, el corazón late más rápido para llevar más sangre a los músculos; respiramos más rápido para tener más aire en los pulmones y resistencia, pero al llenarse hay exceso de oxígeno y el cuerpo da un sensación de no poder respirar, entonces llega el mareo para parar y sacar un poco el aire; el temblor prepara a los músculos para la acción y la visión borrosa es para enfocar mejor el supuesto peligro. Estas sensaciones son normales y el cuerpo las usa para protegerse; puedes preguntarle a 10 personas si ya lo han sentido y verás lo común que es.
Beneficio: al aprender sobre las sensaciones nos ayuda a dejar de tenerles miedo cuando las sentimos.
Trabajar los pensamientos:
Podemos identificar esos pensamientos que aumentan el miedo y cambiarlos, por ejemplo: “pienso que voy a morir porque aumentó mi presión”, podría pensar que cuando hago ejercicios siento lo mismo y no estoy muriendo. También podemos comparar los síntomas de pánico con los de enfermedades reales. Y hablar consigo mismo de manera realista, como repetir afirmaciones “Esto pasará”, “Estoy a salvo”, “Puedo manejar esto”.
Beneficio: al hablar de una forma realista podemos cambiar nuestra perspectiva y calmar la mente.
Practicar la Respiración Profunda y Lenta
Siéntate en una posición cómoda, pones una mano en el pecho (no debe moverse) y la otra en el abdomen. Inhala profunda y lentamente por la nariz durante 5 segundos, mantén la respiración durante 2 segundos, y exhala lentamente por la boca durante 6 segundos. Sostienes sin aire por 2 segundos y repites el ejercicio por 3 minutos, todos los días en la mañana y en la tarde.
Beneficio: La respiración profunda y lenta desde el abdomen, activa el sistema nervioso parasimpático, lo que ayuda a regular los síntomas.
Ejercicio de Puesta a Tierra: 5-4-3-2-1
Identifica 5 cosas que puedas ver. Identifica 4 cosas que puedas tocar. Identifica 3 cosas que puedas escuchar. Identifica 2 cosas que puedas oler. Identifica 1 cosa que puedas saborear.
Beneficio: Ayuda a distraerte del ataque de ansiedad enfocándote en el momento presente y en tu entorno.
Escaneo Corporal Rápido
Cierra los ojos y enfoca tu atención en diferentes partes de tu cuerpo, comenzando por los pies y subiendo hasta la cabeza. Relaja cada parte del cuerpo mientras te enfocas en ella.
Beneficio: Este ejercicio ayuda a reducir la tensión física y mental.
Dejar de usar esas medidas de seguridad:
Si te estás acostumbrando a usar algunos objetos para ayudarte, como tener una bolsa para el vómito, agua por si la garganta se pone seca, es momento de dejar estos hábitos.
- Beneficio: dejar de usar medidas de seguridad te ayuda a afrontar los síntomas.
Implementar estas estrategias puede ayudarte a salir rápidamente de un ataque de pánico y recuperar el control. Recuerda que también puedes contarle a un amigo o familiar sobre lo que te sucede, usar aceites esenciales que calman e imaginar que estás en tu lugar seguro, como una playa o debajo de un árbol; cada persona es diferente, así es que experimenta con estas técnicas para encontrar las que funcionen mejor para ti.