Es un análisis que consiste en medir la glucosa (cantidad de azúcar que se encuentra en la sangre) con tiras reactivas y un medidor de glucosa, a través de una gota de sangre obtenida de los vasos sanguíneos más pequeños que tenemos llamados capilares y que se encuentran cerca de la superficie de la piel. La muestra se toma de las manos en la yema de uno de los dedos.

Esta prueba le permite al médico revisar el control de la glicemia, detectar prediabetes, bajas de glicemia (hipoglicemia). En las personas diabéticas, conocer si están respondiendo adecuadamente a la medición o por el contrario es necesario ajustar el tratamiento, ya que este es imprescindible para lograr el control de la diabetes y prevenir sus complicaciones.

Dra. Julissa Bergantiño J.

Médico General

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