Esta subespecialidad trata principalmente los problemas de los vasos sanguíneos del cerebro. Siendo los más comunes los aneurismas y las malformaciones arteriovenosas.
Los aneurismas comúnmente ocurren en los vasos sanguíneos dentro del cerebro (aunque pueden aparecer en cualquier parte del cuerpo), y comienzan con una debilidad en la pared de tres capas de una arteria, por lo general en un punto donde un vaso sanguíneo se ramifica en dos o más arterias más pequeñas; la sangre que pasa por ese punto débil ejerce presión sobre él causando que la arteria se abulte y se hinche. La especie de bolsa que sobresale de la arteria, o esa área inflamada del vaso sanguíneo, se llama aneurisma.
La elección del tratamiento suele decantarse entre el grapado quirúrgico, la embolización cardiovascular, los desviadores de flujo y otros.
Y las malformaciones arteriovenosas, son marañas anormales de vasos sanguíneos (también suceden en cualquier parte del cuerpo, pero con mayor frecuencia en el cerebro y la columna vertebral). En una MAV, la sangre no sigue su camino normal, sino que fluye directamente de las arterias a las venas, sin pasar por los diminutos capilares que normalmente los separan. Las venas, diseñadas para aceptar sangre de capilares minúsculos, se estresan y se dañan por una velocidad de flujo y presión de la sangre que fluye desde las arterias que no están hechas para soportar.
Las opciones de tratamiento incluyen la resección o extirpación quirúrgica, la embolización endovascular y la radiocirugía estereotáctica.
Neurocirujano